jueves, 30 de julio de 2020

NL. 11.1 VIVIENDO LA FE EN LA FAMILIA 1


CULTIVAR LA FE EN FAMILIA

La fe es un caminar permanente con y en Dios, en el cual cada día nos acercamos poco a poco al gran misterio de su amor. En este caminar los padres con sus hijos se acompañan mutuamente durante toda la vida.  

Los maestros más impactantes, permanentes y determinantes en la formación de la fe para los niños y los adolescentes son sus propios padres. El hogar es el primer espacio de evangelización y los padres son los animadores más influyentes en la catequesis de sus hijos. Por esta razón, es necesario que en nuestros hogares católicos se retomen el cultivo de la fe como eje de la vida familiar para que, parafraseando al sacerdote irlandés P. Patrick Peyton, “familia que reza, celebra y bendice unida, permanece unida”.

A continuación, algunas sugerencias[1] y estrategias para cultivar la fe en familia:

1.     Hacer de la hora de la comida, un tiempo sagrado: Establecer algunos días de la semana para la “comida familiar” e invitar a los hijos a hacer la bendición de los alimentos o a dar las gracias por estos. De igual manera se puede utilizar este espacio para dialogar acerca de los sucesos y situaciones cotidianas, de los valores y creencias católicas. Esta es una forma de hacer conexión entre la mesa del hogar y la mesa del Señor en la Eucaristía.

ORACIONES PARA ANTES DE LAS COMIDAS

Bendición tradicional
Bendícenos Señor, y bendice estos dones que vamos a recibir de tu infinita bondad, por Cristo, Nuestro Señor,
Amén.

Otra opción de bendición
Te damos gracias, Señor, por estos alimentos.
Bendice las manos y el corazón de las personas que los hicieron llegar a nuestra mesa.
Has que siempre tengamos presente al hambriento, al que no tiene hogar, al que sufre;
 y especialmente, aquellos que ocupan nuestros pensamientos hoy . . .
Mantén a nuestra familia cerca de ti y sé nuestro guía en todo nuestro caminar.
Te lo pedimos por Cristo, Nuestro Señor,
Amén.

2.     Leer, orar y hablar de las Sagradas Escrituras en familia: invitar a cada uno a compartir lo que Dios les dice a ellos en la Palabra. Procurar que cada uno tenga su propia Biblia (acorde a su edad).
1.     Continuar la tradición de las bendiciones: bendecirse mutuamente al salir de casa o al irse a dormir. Orar juntos en los eventos importantes y días especiales de la familia.

BENDICIONES PARA LA FAMILIA
Una oración para los padres
Dios de amor: Bendice e ilumina a estos padres que nos dieron la vida.
Para que nos puedan seguir guiando con amor, sabiduría y compresión.
Dales la fuerza y el valor para que sus palabras y acciones nos reflejen tu presencia.
En los momentos difíciles que tengan, que encuentren el consuelo en ti y la luz que lo guíe a salir adelante.
Dales paciencia y humildad para reconocer cuando no están en lo correcto para que así, puedan seguir guiando a nuestra familia por el buen camino.
Ayúdales a conocerte más para que nos trasmitan una fe viva y continuar cimentando nuestras bases en ti.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor, Amén.

Una oración para los hijos
Dios, mira a estos adolescentes, todas sus necesidades, esperanzas, retos y dificultades por las que ellos están atravesando.
Mándales sabiduría en abundancia para enfrentar el vivir de cada día con la seguridad de que tú los estás protegiendo.
Ilumínalos para reconocer tus gracias de cada día, dales oídos para escuchar tu mensaje a través de otros, labios para compartir con los demás de tu amor y manos para servir a tu comunidad.
Que cada paso que den los lleve acercarse más a ti y así profundizar más su fe.
Te lo pedimos por Cristo, nuestro Señor, Amén.

Una oración por la familia
Señor de la vida: Bendice y protege nuestra familia.
Mantennos cerca, conectados y protegidos de todo mal.
Llénanos de amor y paciencia en nuestro trato muto.
Ayúdanos a resolver todo lo que nos separa y a celebrar todo lo que nos une como una familia, en donde vives y reinas por los siglos de los siglos.
Te lo pedimos por Cristo, nuestro Señor, Amén.

2.     Hablar acerca de las imágenes religiosas que haya en la casa: dialogar acerca del sentido, historia y valor para la fe de las íconos o imágenes religiosas.

 
 
3.     Participar en un ministerio diferente en la parroquia o de servicio a la comunidad: procurar que cada miembro de la familia participe en un ministerio o servicio diferente en la parroquia o en la comunidad, así como también buscar la oportunidad para servir juntos como familia.

4.     Priorizar los sacramentos, la Eucaristía y la catequesis permanente: hacer que la misa, la preparación sacramental y los itinerarios catequéticos vividos en los ministerios y grupos parroquiales se conviertan en prioridad en la familia, para de esta forma fortalecer la fe.

5.     Celebrar los tiempos litúrgicos y los días festivos: decorar el hogar con colores y símbolos de cada tiempo litúrgico, procurando conectarlos con la vida diaria familiar.

Por ejemplo, en el Adviento, la una corona y las cuatro velas; en la Navidad hacer el pesebre; durante la Cuaresma, las plantas bendecidas... En los días festivos religiosos, reunirse en familia para hacer novenarios u oraciones especiales tales como el novenario de la Virgen de Guadalupe, la novena de Navidad, la procesión del Vía Crucis…

6.     Orar creativamente en familia: captar la atención familiar empleando objetos o imágenes que les ayuden a conectar la vida con la fe.

Orar con los dones: Cada miembro de la familia escribe en una hoja la cualidad o talento que más lo identifica y comparte qué ha significado ese talento o cualidad en su vida. Luego de que todos hayan compartido sus talentos o cualidades, se invita a que piensen en su relación con Dios y de qué manera aprecian los dones de Dios en sus vidas. Cada uno agradece a Dios por los dones que Dios le ha dado.
 
Orar con la naturaleza: Se pide a cada miembro de la familia que piense en un ser de la naturaleza que más le gusta o admira y de qué manera ve el amor de Dios en ese ser. Al final todos oran con el Tercer Cántico de Daniel, Daniel 3,57-88.56.

Orar fotografías o cuadros: Invitar a cada miembro de la familia que, del álbum de fotos familiar, cuadros colgados en la casa o una foto de archivo en el celular, piense en la imagen que mejor defina a la familia en estos momentos. Cada uno comparte su reflexión y ofrece una oración de acción de gracias a Dios por la familia.

 
 

[1] National Federation of Catholic Youth Ministry—NFCYM por sus siglas en inglés (La Federación Católica Nacional para el Ministerio para Adolescentes). www.NFCYM.org. Fortaleciendo Familias en la Fe, folleto de recursos para la familia sobre la fe. Recuperado de: https://www.dosp.org/wp-content/uploads/38_Recursos-de-fe-para-la-familia.pdf



1 comentario:

  1. Excelente propuesta y es lo que la comunidad espera. Muchas gracias

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