CENTRO DE LA DIMENSIÓN SOCIAL DE LA EVANGELIZACIÓN
TEMA: CAMPOS DE ACCIÓN EN LA PASTORAL DE LA SALUD
OBJETIVO: Identificar los
diferentes campos en los que se puede servir dentro de la pastoral de la salud,
según el contexto de cada territorio o parroquia.
FUNDAMENTACIÓN BÍBLICA:
Mateo 25, 31-46
“Les aseguro que
todo lo que hicieron por uno de estos hermanos míos más humildes, por mí mismo
lo hicieron”.
Nuestra iluminación bíblica en el día de
hoy nos muestra el camino por el que debemos caminar para ser agradables a
Dios, cuidar a nuestros hermanos más pequeños, esto no ser refiere a la corta
edad ni mucho menos al tamaño, se refiere a los rechazados, desplazados,
discriminados o simplemente ignorados por la sociedad.
Las personas con problemas mentales son
algunas que la sociedad ignora, porque no aportan, porque estorban o porque son
una carga, es allí donde nuestra misión como animadores de la pastoral de la
salud en salud mental cobra importancia y relevancia, hacer visualizar a estos
hermanos nuestros, ante la sociedad que, a pesar de su condición, son amados
del Padre y nosotros como trasmisores de este amor estamos para demostrarles
ese amor.
1. Pastoral con las personas con discapacidad
El objetivo fundamental del animador de
pastoral de la salud en este servicio es acompañar en su camino de vida, de
curación y de muerte, respondiendo a sus necesidades religiosas, compartiendo
sus alegrías y esperanzas, inquietudes y miedos, contribuyendo a su bienestar
psíquico y al mismo tiempo físico, para transmitirles un sentido de serenidad y
pertenencia. Todo ello significa crear un espacio que sea al mismo tiempo
familiar y protegido, en el que las personas con discapacidad puedan expresar
sus experiencias de vida, sus vivencias cotidianas con su discapacidad, sus
necesidades particulares y asimismo sus interrogantes religiosos y sus
esperanzas. Debe ser un espacio en el que las personas con discapacidad puedan
tematizar libremente lo que significa tener una condición de discapacidad y/o
adquirir una discapacidad, sentirse marginados y/o ser realmente marginados,
expresando su sentido de impotencia, su rabia, sus miedos e inquietudes, sus
frustraciones y su sentido de culpabilidad, hablando libremente de la vida y de
la muere, pero también de su alegría de vivir y de su felicidad, esperanzas y
confianza, pata interpretarlos a la luz de la tradición bíblica-cristiana y de
sus experiencias personales de fe y de vida.
2. Pastoral con enfermos terminales o en cuidados
paliativos.
Los cuidados paliativos hacen referencia a
los cuidados que se les brindan a las personas que están gravemente enfermas
que se encuentran en el último estado de una enfermedad incurable.
Esta unidad, como se le denomina en las
instituciones hospitalarias, cubre un amplio enfoque terapéutico: terapia del
dolor con enfoque interdisciplinario, tratamiento específico de síntomas
problemáticos. Algunos de estos casos se tratan en los domicilios de los
enfermos o en otro espacio denominado hospice, que es un lugar especial dentro
del centro hospitalario donde se tratan a pacientes con enfermedades terminales
pero que no pueden recibir atención en otro lado, necesitan cuidados las 24
horas y sus familias no pueden hacerlo.
La idea clave de la actividad
pastoral en los cuidados paliativos es: “Nuestra salvación está en el Señor y
nuestro compromiso es por el Hombre”.
Las actividades específicas que realiza la
pastoral en este campo son:
Escucha y diálogo: entrevista
personal, para motivar a las personas a reconciliarse consigo mismos y con los
demás, a perdonarse, a experimentar el Dios del amor y de la hospitalidad.
3. Pastoral con personas que padecen
trastornos mentales.
Es necesario iniciar por plantear la
importancia de la pastoral para el campo psiquiátrico, hay que partir que el
enfermo busca afecto y encontrar el sentido de su enfermedad, desde este punto
de vista es igual que otro paciente que desean descubrir la razón de su dolor,
el animador es el experto del alma, del espíritu, capaz de dar respuestas
sencillas que todos puedan entender. Un gesto de cariño, una caricia, una
sonrisa, un paseo juntos son actitudes que hablan en cualquier contexto. Llevar
a Jesús entre enfermos mentales consiste sobre todo en llenarse de paciencia,
capacidad de escucha y cierta creatividad. Los discursos lógicos o sistemáticos
no son lo que más se necesitan; por otra parte, la psiquiatría no siempre es
capaz de establecer protocolos terapéuticos capaces de identificar la solución
justa al problema específico, sino que intenta, con su conocimiento, sanar
situaciones que afronta.
Por otra parte, es necesario reconstruir la
red de relaciones que todos los seres humanos necesitan para vivir y que el
enfermo en particular necesita para redefinirse en un contexto social “normal”.
En este contexto es de gran relevancia el enlace con la familia, que a menudo
sufre con el enfermo, y a veces incluso más que este.
4. Pastoral hospitalaria.
La pastoral en este sector ha tenido que
ir avanzando según los tiempos. En la actualidad no se puede diseñar una
pastoral de la salud meramente sacramentalista, preocupada principalmente por
la celebración de los sacramentos propios del cristiano enfermo. La pastoral de
la salud hoy debe programarse como una acción en equipo, que acompaña procesos
y situaciones personales de especial vulnerabilidad. Por ello hablar hoy de la
pastoral hospitalaria, implica hablar de un campo amplio que abarca personas y
patologías, vivencias y su entorno próximo. Esto ha exigido un cambio en las
actitudes y en la mentalidad, en la manera de concebir y llevar a la práctica
esta labor pastoral.
Algunas acciones pastorales dentro de estas
instituciones son:
ü
Información de la existencia del servicio dentro
del hospital.
ü
Sensibilización de los profesionales para
detectar necesidades espirituales y/o religiosas.
ü
Escucha y cercanía, acompañando procesos desde
el ámbito que le es propio y en estrecha colaboración con los demás profesionales.
ü
Asesoramiento en las cuestiones éticas y
religiosas.
ü
Espacios de celebración y oración.
ü
Acompañamiento a las familias de los enfermos.
ü
Acompañamiento a los colaboradores de la
institución.
5. Pastoral de la salud con las personas mayores.
Los ancianos constituyen una fuente
sumamente rica para la pastoral. Más que ser los destinatarios de la acción
pastoral, los mayores son verdaderos evangelizadores a través de su vida, su
experiencia y su sabiduría, y con su palabra tienen la oportunidad de devolver
lo que han recibido en el curso del tiempo. La acción pastoral pasa
indudablemente a través de una plena valoración de sus capacidades. Los
ancianos han aprendido a dar las gracias a Dios y su fe constituye un
testimonio vivo. También pueden tener momentos de desánimo, pero a mismo tiempo
poseen los recursos necesarios para recuperarse. De la vida riqueza material
puede reemplazar el valor de una amistad y de un cariño.
Este punto lo ampliaremos en la
próxima formación.
Reflexión
personal
1.
¿Crees que es
importante la Pastoral de la Salud en la vida parroquial?
2.
Dialoga con tu
sacerdote para fortalecer la pastoral de la salud con los ministros de
comunión.
3.
Lee este corto
artículo de los Hospitalarios de San Juan de Dios sobre salud mental.
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